Hoy venimos a hablarte sobre la mejor forma de llevar una buena higiene dental, pero en particular vamos a hacer hincapié el cepillarse la lengua y tenerla siempre limpia y sana. No en vano la lengua es un músculo fundamental en nuestra boca, por lo que es de vital importancia cuidar también de su salud, tal y como hacemos con nuestra dentadura.
Vamos a ver en profundidad la mejor forma de hacerlo.
La lengua
Como bien sabrás, aparte de ser un músculo, en nuestra lengua encontramos nuestras papilas gustativas y cumple diversas funciones fundamentales. Se encuentra formada por varias partes, tales como:
- La punta lingual
- La cara inferior de la misma
- La propia base de la lengua
- Los bordes linguales
Entre las funciones más importantes que tiene este órgano para nosotros vamos a destacar las siguientes:
- Es capaz de detectar el sabor de los alimentos, gracias a sus papilas gustativas. Son ellas las encargadas de trasladar esa información sobre ese sabor directamente a nuestro cerebro.
- Actúa durante la digestión de los alimentos que tomamos, ya que puede mover la comida dentro de nuestra boca, ayudando a colocar esos alimentos sobre los molares para poder deshacerla de la mejor forma posible, con lo que favorece al mismo tiempo la digestión.
- También juega un papel fundamental en el habla, ya que es capaz de llegar a alterar el aire y producir sonidos distintos.
- Pero ojo, aparte de todo ello, nuestra lengua es un foco de gérmenes si no le prestamos atención a su higiene. Al estar repleta de montículos diminutos, los gérmenes permanecen ahí, dando lugar de esta forma a lo que se conoce como halitosis o mal aliento y a la más que segura aparición de caries en los dientes.
Cómo limpiarla
La mejor forma de encargarnos de su higiene es emplear unos instrumentos conocidos como limpiadores linguales o raspadores. Están elaborados con plástico y gracias a ellos conseguiremos acceder a lugares de nuestra lengua que con un cepillo cotidiano no accederíamos.
Estos raspadores linguales cuentan con 2 caras distintas:
- Una cara lisa con la que higienizaremos ambos lados de la lengua.
- Una cara más ondulada, para limpiar de forma eficaz el centro de la lengua, que siempre suele presentar algo de depresión en su parte central.
A continuación te detallamos, paso por paso, cómo debes de limpiarla:
- Sacar la lengua todo lo que puedas de tu boca.
- Utilizar el raspador de atrás hacia adelante con su parte ondulada.
- No realizar ningún tipo de presión mientras empleamos estos limpiadores y repetir la operación varias veces, aclarando nuestro raspador con el agua, para retirar los restos que queden adheridos.
- Limpia los laterales o bordes de la lengua, esta vez con la parte lisa del limpiador. Ya sólo nos quedará enjuagarnos bien la boca para eliminar de esta forma cualquier posible resto de bacterias que queden en la boca.
Si sigues nuestros consejos de forma diaria la salud de tu lengua siempre estará perfecta y evitarás problemas bucodentales mayores en el futuro. En caso de que necesites más información, te puedes poner en contacto con nosotros en cualquier momento o acudir a nuestra Clínica dental de Málaga.